Después de los excesos de fin de año ¿A tu bolsillo de urge un “detox”?
Comencemos adaptando este concepto tan ad hoc a la época navideña definiendo que la palabra “detox” se refiere a “desintoxicación”, que ampliando su significado y contextualizándolo en términos financieros, significa depurar.
Depurar hábitos de consumo es imprescindible para llevar finanzas sanas e iniciar tranquilamente el año.
¿Alguna vez has llegado a fin de mes con la sensación que tu bolsillo se vacía rápidamente?
¿Tienes suscripciones por doquier? Amazon, Netflix, Spotify y demás plataformas de streaming
Con la pandemia ¿te volviste aficionado a las compras por internet?
¿Haces pedidos domicilio con mayor frecuencia?
La intención de hacernos estas preguntas es resaltar que el gasto hormiga no es solamente salir a la calle y comprar algunas botanas o dar algunas propinas, en realidad el gasto hormiga contemporáneo es digital y al no ser tangible resulta engañosamente invisible, sin embargo, es un gasto que muchas veces hacemos a largo plazo, a veces ni lo usamos tanto y mantenemos suscripciones con estas plataformas durante años, perdiendo así un dinero que podría ser mejor invertido.
A continuación, enlistaremos 4 consejos para iniciar tu detox financiero:
PRIORIDADES: El primer paso para eliminar los malos hábitos de consumo es establecer prioridades, empezando por lo necesario, siguiendo por lo productivo y terminando por nuestros gustos. En este orden y no al revés. Hay cosas que no son prioridades, ni nos hacen felices y solamente roban dinero del presupuesto
PERIODICIDAD: Hay gastos necesarios pero que los hacemos cada cierto tiempo, un ejemplo es: cortarnos el cabello, no lo hacemos diariamente y aunque lo necesitamos no entra en la categoría de prioridades.
Comprar ropa es otra excelente oportunidad de ahorro, ya que aunque todos necesitamos ropa nueva, no la compramos todos los días. Aumentar el periodo en que realizas este tipo de gastos es de mucha ayuda.
SUSTITUYE: Un ejemplo de esto es que, si tienes comidas de negocios, puedes cambiarlos por desayunos que son más económicos o mover las citas a la hora después de la comida, un café es mucho más barato que una comida completa.
ELIMINA: Habiendo hecho las anteriores, hay que tomar la decisión de eliminar gastos ociosos.